El sector cafetalero planta sus esperanzas en nuevo plan de reactivación y en recursos prometidos por Guillermo Lasso al agro

Productores de café esperan que haya $1.000 millones para créditos al 1% de interés para el agro en general.

El sector cafetalero nacional lleva ocho años de una caída libre de producción y de exportaciones, con una reducción de más del 75% y $ 200 millones menos en divisas.

Esta, en pocas palabras, es la radiografía del sector, según el análisis de Pablo Pinargote, gerente de la Asociación Nacional de Exportadores de Café (Anecafé), quien lamenta que actualmente la producción no llega a más de 60.000 hectáreas.

Esto equivale a 300.000 sacos de café de 60 kilos, es decir, 7 quintales por hectárea. resultando uno de los más bajos rendimientos de toda la región.

Ante este nada alentador panorama, Pinargote asegura que es necesaria una reactivación del sector, por lo que dice que desde Anecafé se impulsa el Plan Nacional de Reactivación, a través de un proyecto que presentaron al Gobierno actual y también al entrante.

Este plan fue presentado el 12 de marzo pasado por el ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Iván Ontaneda, quien además anunció la creación de una mesa de crisis para el sector.

Sobre el plan, Pinargote explica que se basa en producir 50.000 hectáreas nuevas equivalentes a 3 millones de quintales de café, de los cuales el 50% sería variedad arábigo y el 50% de la variedad robusta.

En tanto, en el sector cafetalero hay diferentes visiones sobre la reactivación y el método para llevarla a cabo.

ParaLuis Delgado, propietario de LDC Inversiones, que está en el mercado con la marca de café tostado La Sultana, cree que el plan anunciado es el inicio del acceso al crédito para la renovación de cafetales y la reactivación del sector que considera importante, pues asegura que la industria está por debajo del 60% de su capacidad de producción por la falta de materia prima, ya que la que importa se vuelve cara y no le permite competir con otras industrias.

“El café ecuatoriano, por su ubicación geográfica, tiene cualidades organolépticas muy especiales que gustan del consumidor en el exterior, pero también debemos capacitar a todo el sector en aplicar nuevas técnicas de producción, de semillas y más aún incentivar el consumo interno de café para generar la sostenibilidad del productor”, sostiene Delgado.

Mientras, Vicente Cárdenas, coordinador nacional del sector cafetalero, no es tan entusiasta con la naciente iniciativa.

Él también analiza la situación. Indica que Perú, que casi no tenía producción de café, ahora produce más de 6 millones de sacos, Colombia 15 millones, Centroamérica 9 millones y Brasil 60 millones de sacos. “No podemos competir con esas cantidades, pero en calidad hemos demostrado que producimos un excelente café, en la subasta del 2020 nuestro café salió con un precio de $ 70,25 la libra, estamos ubicados como uno de los cafés mejores del mundo”, asegura el productor, quien recuerda que Ecuador en algún momento llegó a producir 2 millones de sacos y fue un rubro importante junto con el petróleo.

Sin embargo, también recuerda que la crisis del café empezó en el 2011 con la roya, una plaga que afectó a los cafetales, más la derogación de la ley del sector que los privó, según él, de capacitación y créditos con una tasa de interés 50% menos que la del mercado, tres años de gracia y plazos de pago de hasta siete años.

Agrega que tras la eliminación de la ley se creó un programa impulsado por el gobierno de Rafael Correa para reactivar 120.000 hectáreas y producir 2 millones de sacos, hasta el 2021, pero no se cristalizó, asegura Cárdenas, quien atribuye a este programa la debacle del sector.

Asegura que el Gobierno importó unas 120 toneladas de café de Brasil y se las entregaron directamente a los caficultores, sin ninguna selección previa ni análisis del Iniap. “Vino a infectar más y agudizó más el problema de la roya, y bajamos la calidad del café”, asegura.

Añade que, en el actual Gobierno se lanzó un crédito cafetalero, pero al 11,5% de interés, una condición imposible para producir café, pues este recién produce al cuarto año.

En cuanto al plan presentado en marzo, lo ve inviable debido al poco tiempo que le queda al actual Gobierno, e indica que el sector productor prepara propuestas para el régimen entrante de Guillermo Lasso, de quien espera que cumpla lo previsto en su plan: asignar al agro recursos por $ 1.000 millones al 1% de interés y con tres años de gracia.

“Estos recursos están en el plan de Guillermo Lasso, en la propuesta que hizo a todo el sector agropecuario del país”, aseguró.

En tanto, Pinargote resalta que lo innovador del plan presentado, para el país y la región, es que buscará conectar al productor con el comprador final en la cadena de suministro, logrando una verdadera sostenibilidad de la producción que permitirá al caficultor convertirse en un empresario rural.

“El proyecto denominado Finca Total, desde la semilla hasta el consumidor final, permitirá lograr una trazabilidad total de nuestro producto”, avizora el gerente de Anecafé.