- abril 5, 2021
- Posted by: soporte
- Categoría: National
La canasta exportable se intenta expandir con productos no tradicionales
Lograr vender una fruta poco conocida en otro mercado internacional no es un asunto sencillo. Demanda paciencia, esfuerzo y estrategias para convencer primero al potencial comprador que pondrá en las perchas de su negocio el producto.
La tarea implica desde enviar muestras de la fruta para hacer degustaciones, explicar sus propiedades y hasta enseñar cómo se come o se prepara. Parte de esa labor les tocó hacer a Alexandra Pisuña y Geff Endara para lograr que el pepino dulce pueda entrar a los supermercados españoles.
Estos ecuatorianos residentes en Madrid trabajan con Pitavit, una empresa nacional que ha comenzado a realizar envíos de esta fruta no tradicional hasta la Unión Europea.
La fruta sale por vía aérea en cajas de 3 kilos que contienen 12 unidades. Pitavit adquiere el producto a agricultores de la parroquia Julio Andrade (Carchi).
La carga con pepino dulce se exporta en conjunto con otras frutas que comercializa esta firma y que en total suman 22 palés semanales. Es una fruta seleccionada que sale como prémium en un empaque negro.
Alejandra Vallejo, gerente comercial de Pitavit, señala que les ha tomado unos dos meses concretar los primeros embarques de este producto no tradicional a Europa.
Esta fruta carnosa, rica en agua y fibra, puede pesar unos 120 gramos y alcanzar un tamaño superior al de una naranja. Tiene propiedades diuréticas y posee vitamina A y C.
Una vez que el pepino dulce llega a España también se envía una parte hasta Portugal y Francia.
Vallejo señala que Pisuña y Endara han sido claves para promover esa fruta en el mercado español y poder encontrar un espacio en los supermercados de principales cadenas.
Carchi es uno de los centros de producción del pepino dulce. La parroquia Los Andes, que está en la jurisdicción del cantón Bolívar, también registra plantaciones de esta fruta de origen andino.
Parte de la producción que se cosecha en esa población salió este año hacia Estados Unidos. En enero se envió una muestra de 300 kilogramos a ese mercado y en febrero se mandó un cargamento de 600 kilos.
De la plantación de Édison Mejía, pequeño productor del cantón Bolívar, salió esa carga exportable, cuya gestión recibió apoyo del Ministerio de Agricultura.
Para cultivar esta fruta, los agricultores están apostando por el uso de mucha materia orgánica y un manejo adecuado para mejorar la calidad. La idea es que el producto esté libre de agroquímicos y pueda ser consumido como una fruta fresca.
El pepino dulce tiene color amarillo y rayas moradas cuando comienza a madurar.
Carchi ha incorporado el pepino dulce dentro de su oferta exportable y busca que este producto pueda tener acogida en otros mercados.
A inicios de este mes, el gobernador Óscar Ruano se reunió con el embajador de Estados Unidos, Michael J. Fitzpatrick, para mostrar los productos carchenses, entre los que están los pepinos dulces, granadillas, quesos frescos y maduros, artesanías, mango, entre otros.
Las oportunidades para la naranjilla, tomate de árbol y guanábana
La nostalgia por los productos que se usan en la cocina ecuatoriana hace que los migrantes en Europa busquen ciertos ingredientes para la preparación de sus platos como la naranjilla y el tomate de árbol. Pero los españoles también se están interesando en los supermercados por este tipo de productos que llegan de Ecuador.
Alejandra Vallejo, gerenta comercial de Pitavit, señala que estos dos productos, al igual que la granadilla y la guanábana, están teniendo oportunidades en mercados como el español.
Señala que los ecuatorianos residentes en esa nación han ayudado a que estos productos también penetren en los hogares de España.
Pitavit incluye en sus embarques semanales volúmenes de estos productos. “Mejor arranque han tenido la naranjilla, el pepino dulce y la guanábana”, dice Vallejo.
A más de España, Pitavit está buscando llegar con guanábana a países de Asia como Malasia. En septiembre pasado enviaron un primer lote de esta fruta.
Vallejo asegura que durante esta pandemia las frutas han tenido buena demanda debido a que se consume mucho en los hogares que han pasado por periodos de confinamiento.